La sequía ha provocado la muerte del ganado y la desesperación entre los campesinos, quienes ruegan por la llegada de lluvias que alivien la situación.
En zonas rurales como Los Copeles, Mimbres, Las Balsas, El Salado, Egipto, El Siglo, Venado Central, Las Piedras y El Llano, entre otras, se ha sentido con mayor fuerza la mortalidad del ganado. Esta situación no solo afecta la producción de leche y sus derivados, sino también la calidad de la carne. Los ganaderos solo esperan que el panorama cambie con la llegada de las lluvias lo antes posible.