Montería. Una caso de violencia contra la prensa ha sacudido a la comunidad de Montería, cuando un taxista identificado como Heraldo Narváez arremetió contra un periodista con un bate.
El motivo detrás de este ataque se remonta a denuncias realizadas hace más de un año sobre irregularidades en el cementerio de Juan 23, donde la esposa de Narváez ejercía como administradora.
Se alega que presuntamente la administración del cementerio estaba involucrada en prácticas ilícitas, incluyendo la venta repetida de bóvedas.
Narváez, quien también es vocero de los taxistas locales, ha sido señalado como el perpetrador de este acto de violencia.
El incidente ocurrió en el barrio Juan 23, donde el agresor reside, mientras el periodista realizaba imágenes del puesto de salud local. Testigos del incidente afirman que Narváez salió de su vehículo armado con un bate, mostrando una clara intención de agredir al periodista por su cobertura de las denuncias relacionadas con el cementerio.
Esta situación subraya la importancia de la libertad de prensa y pone de relieve los riesgos que enfrentan los periodistas al informar sobre temas sensibles, como la corrupción y el abuso de poder en la comunidad.
