La comunidad de más de 11 municipios de tres departamentos enfrenta un grave peligro debido al riesgo inminente de ruptura del jarillón en el corregimiento de Santa Mónica, bajo la jurisdicción de Magangué. Ante esta situación, los habitantes y el alcalde de Magangué, Pedro Alí, hacen un llamado urgente a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) para evitar que se repita otro desastre similar al “Caregato”, con consecuencias potencialmente más devastadoras. Muchas de estas comunidades aún se están recuperando del impacto del anterior desastre.
Según expertos, el jarillón, que ya está mostrando signos de deterioro, está enfrentando la presión de las aguas del río Cauca, las cuales se han vuelto más caudalosas desde el cierre del “Caregato”. El redireccionamiento de estas aguas hacia el río ha aumentado significativamente el riesgo para estas comunidades vulnerables, ya que están expuestas a posibles inundaciones y desbordamientos.
