En una escena inolvidable que reunió a más de 4 mil motociclistas y mototaxistas, Montería se vistió de energía y unidad. En un evento que resonó con el apoyo de sus familias, la ciudad vibró con la pasión y el compromiso de la comunidad motera.
Este momento emblemático no solo fue un encuentro de vehículos, sino un símbolo poderoso de la solidaridad y determinación de la ciudad. Cada rincón resonaba con el espíritu emprendedor y el deseo colectivo de transformar Montería. Este mar de motocicletas es más que un desfile; es un testimonio de la fuerza comunitaria y la esperanza en un futuro mejor.
Impulsados por este apoyo abrumador, estamos listos para enfrentar los desafíos y crear oportunidades para todos. Juntos, hemos marcado un hito en la historia de Montería, demostrando que cuando nos unimos, no hay límites para lo que podemos lograr.